A lo largo de los últimos años han visto la luz multitud de películas que tratan de forma más o menos directa el tema de la gentrificación, especialmente en las grandes ciudades y los barrios marginales de estas. Justo este año, la distribuidora estrella del panorama independiente, A24, ha estrenado The last black man in San Francisco, que trataba el tema de forma directa. El irlandés Lorcan Finnegan presenta con Vivarium, su segundo largometraje, una película que se retuerce sobre si misma para estirar su premisa al máximo; un concepto de ciencia ficción sencillo pero con potencial que el director de Without name sabe explotar a la perfección, incluso si la propia estructura de la narración implica que sus poco más de 90 minutos se sientan pesados.
El argumento de Vivarium se centra en una pareja (Jesse Eisenberg y una espectacular Imogen Poots) que, en una visita casual a una casa a la venta en un nuevo vecindario, se ve atrapada en bucle; las cosas solo empeoran cuando un bebé aparece en una caja de cartón en la puerta de su casa.
Con una fotografía medida al milímetro y planos verdaderamente bellos, la historia se desarrolla en torno a los problemas de la pareja, que nunca termina de resignarse a su situación; aunque igual es aquí donde Finnegan flaquea, ya que, si intentamos excavar más allá de la superficie, no hay mucho donde rascar: todas las temáticas que parece afrontar se ven solapadas o desplazadas por lo insólito de su argumento y desarrollo. A pesar de esto, cuando esa base sobre la que el realizador irlandés construye su película es tan innegablemente sólida como la de Vivarium, no queda más que aplaudir y dejarse llevar por un laberinto lleno de sorpresas que hará las delicias de los mayores aficionados al género.
3 comments
Es una película que deja poso y hasta diría que mal cuerpo. La habré visto hace un par de semanas (creo, el tiempo en cuarentena es relativo) y todavía me viene a la cabeza de vez en cuando. De lo más interesante visto este año, sin duda.
El desenlace es tremendo, pero de por sí el nene solo produce incomodidad.
Encima esas nubes!
Pudo haber sido un capítulo largo de la dimensión desconocida o Channel zero.
¡Q ganas de matar al nene!