Se acercan fechas de festividad, celebración, luces y regalos. Esos momentos en los que estamos en casa un domingo por la tarde y nos apetece una buena manta y una película navideña. Probablemente en el momento de escoger lo que ver, la mayoría decidáis algo como Love Actually o Solo en casa, pero un día más vengo a este rincón del blog para recomendar una película perfecta para estas fechas que estoy segura que no dejará indiferente, se trata de La vida de Brian del grupo de comedia inglés Monty Python.
Como amante de la Navidad que soy, se me pasan por la cabeza un gran número de películas que recomendar para estas fechas, pero La vida de Brian en especial atrapa y enamora desde el minuto 0, me atrevería incluso a decir que es la película más divertida que he visto en toda mi vida. El grupo de humoristas que dio vida a esta historia supieron llevar el humor negro, amargo, surrealista e incluso en algún momento “cutre” durante todo el filme de una manera magistral. Los reyes magos equivocándose de portal, un romano corrigiendo las faltas de ortografía de la pintada de una pared, hombres bailando antes de ser crucificados como si de una escena de musical se tratase…
Además del sobresaliente trabajo de guion que destaca en este filme, el acting por parte de los actores es digno de destacar, y es que los mismos creadores de la historia actuaron en la producción, todo por la comedia. A mi parecer hacer humor es de las cosas más complicadas que existen en el mundo de la actuación y la creación de historias, sin duda es más difícil hacer reír que llorar. Una imagen de un reencuentro entre un niño y su mascota, un villancico de fondo, de pronto empieza a nevar y voilà!, el drama perfecto. Pero hacer reír es más delicado, no vale con poner una música triste de fondo, se necesita algo más, ese talento para saber adaptarse a un momento concreto.
Un drama siempre será un drama, ahora y en los años 20, pero lo tiempos cambian y el humor de un año puede ser completamente distinto al del año anterior. Es por esto que La vida de Brian, ahora, de aquí a 20 años y hasta al final de los tiempos, será una obra maestra. Se trata de una obra que supo adaptarse y encontrar ese humor que “nunca pasa de moda”, y que sigue haciendo reír ahora igual que en los años 80.
Si lo que quieres es pasar una tarde divertida, acompañado de esa atmosfera navideña tan acogedora para estas fechas, creo que no se me ocurre una recomendación mejor que esta maravillosa película que (sin hacer spoiler), además de cómica, te hará comprender que “Always Look on the Bright Side of Life”.
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