El director Yann González se dio a conocer con You and The Night (Les rencontres d’après minuit). Aquel debut en el largometraje nos contaba la historia de una curiosa pareja y su sirvienta transexual que organizan una orgía. A lo largo de la velada quedaban al descubierto los traumas de todos los participantes en ella. La ópera prima dejaba patente las influencias del cineasta. Sin demasiado orden y concierto, la cinta aunaba la teatralidad de algunas de las obras del alemán Rainer Werner Fassbinder, la provocación del primer Pedro Almodóvar y el tono alucinado de David Lynch. El resultado era un filme pretencioso, lleno de diálogos sentenciosos y repleto de momentos ridículos que no asimilaba demasiado sus más que evidentes homenajes. No obstante, a pesar de sus evidentes deficiencias, You and The Night se convirtió en un título de culto para el colectivo LGTBIQ. Ahora estrena Knife + Heart, su segunda película, en Filmin.
Knife + Heart (Un couteau dans le coeur), su segundo largo, se decanta por el thriller. González vuelve a optar por un cóctel de referentes. La historia de un psicópata que mata a sus víctimas en el ambiente gay recuerda a la minusvalorada A la caza, de William Friedkin, mientras que el morbo y la estética chillona remite a los giallos de Dario Argento y a Doble cuerpo, aquella particular revisión de La ventana indiscreta que realizó De Palma.
Por si fuera poco la influencia de estos dos cineastas, la banda sonora, firmada por M83, se asemeja a las composiciones electrónicas que idearan Goblin y Pino Donaggio para las películas del italiano y el estadounidense, respectivamente. Todo ello adornado con una trama de amor loco, que parece sacada de una obra de Almodóvar o Fassbinder, entre una productora de porno gay, que observa como sus actores son cruelmente eliminados por un asesino en serie, y su montadora.
González acierta en la creación de una atmósfera enrarecida y extraña, pero vuelve a demostrar que carece de un verdadero estilo propio más allá de la acumulación de guiños y homenajes. Por otra parte, no siempre parece que confluyan el melodrama y el thriller. La cinta se muestra demasiado dispersa y deslavazada. No obstante, cabe destacar que sus diálogos han perdido parte de la falsa transcendencia de su primera película y el conjunto aparece algo más cohesionado, aunque todavía haya momentos que bordean o caen en el más absoluto de los ridículos. Por otra parte, el francés no logra sacar partido de su reparto, en especial de Vanessa Paradis, que parece tan perdida como su personaje en un trabajo con más ambiciones que resultados. En resumen, Knife + Heart es una obra de un cineasta que todavía esta creando su propio universo a través de sus directores favoritos. Es un paso adelante respecto a su debut, pero todavía muestra a un realizador demasiado dubitativo y primerizo.