Paraguay ha despertado cinematográficamente y comienza a mostrar sus trabajos fuera del país como La chiperita en España. Una historia sencilla, tierna e ingenua a más no poder con personajes clásicos ya vistos en las telenovelas televisivas latinoamericanas que aquí lucen en todo su esplendor.
Nos encontramos a la pobre chica que enamorada de su mejor amigo no se atreve a declararle su amor por miedo al rechazo o negativa, también al galán con buen corazón que no ve lo que tiene delante y que se deja seducir por la malvada novia celosa que desea alejarle de todo lo que le puede hacer bien. No pueden faltar los familiares y amigos que ayudan a la pobre enamorada en lo que pueden o las fatalidades y dificultades por las que tiene que pasar para conseguir finalmente al príncipe azul. Todo muy clásico, todo lo que funciona. Como novedad se ha utilizado el guaraní como idioma buscando darle una identidad nacional al producto, una dificultad añadida, pues los actores y actrices no lo dominaban, al escaso presupuesto con el que contaba Hugo Cataldo.
No hay que complicarse mucho la vida para hacer algo que guste. Su canto nos ha emocionado. Chipa, chipa, chipa, chiiiiiipa.