Kirill Sokolov estudiaba un máster en Física y Tecnología de Nanoestructuras cuando se dio cuenta de que lo que de verdad quería hacer era dirigir películas. Con apenas 30 años, había grabado algunos cortos con sus amigos, pero a un nivel aficionado. Hizo las maletas y se apuntó a un curso avanzado para directores y guionistas, y en 2018 presentó al mundo su primer largometraje, Why Don’t You Just Die!.
La película está ambientada casi de forma exclusiva en una localización única, el apartamento al que Matvei va con la intención de matar al padre de su novia. Partiendo de este punto, Sokolov desarrolla un festival de sangre y comedia negra que no tiene mucho que envidiar a los trabajos más inspirados de Martin McDonagh o Quentin Tarantino.
No hay evidencia en todo el metraje de que lo que estamos viendo sea un debut, y aunque el ritmo de la película pueda resentirse en ocasiones, la estructura capitular mantiene el interés vivo en la historia, además de funcionar como una forma interesante de vertebrar y desdoblar una narrativa que parte de un punto sencillo, pero termina retorcida sobre sí misma hasta que Sokolov decide aflojar las tuercas en un final catártico y liberador.
La acción recuerda a la Upgrade de Leigh Whannell, con movimientos de cámara precisos y controlados, pero Why don’t you just die! es una película plenamente consciente de que su histriónico argumento solo funciona si se baña en una capa de comedia negra que alivie algunos de los golpes más oscuros de un trama que no se esconde en mostrar los rincones más sucios de una sociedad rusa que Sokolov presenta tan decadente como fascinante.
«Why Don’t You Just Die!» (2019, Kirill Sokolov)
[imdb]tt7672068[/imdb]