Marvel del papel a la pantalla: Nick Furia: Agente de S.H.I.E.L.D (1998)

Aunque nos cueste creerlo a mediados de los 90 David Hasselhoff era una de las mayores estrellas del mundo (al menos el mundo televisivo). Tras haberse hecho de oro con Los Vigilantes de la Playa Hasselhoff tenía a todos los ejecutivos de las televisiones a sus pies y así cumplió uno de sus sueños: interpretar a Nick Furia, y además con la bendición del mismo Stan Lee.

La verdad es que Hasselhoff daba perfectamente el tipo para el personaje del Coronel Furia: malhumorado, grandote y escéptico. La principal característica de Furia es que no envejece y no tiene ningún superpoder, se basta con sus manitas y sus armas. La aventura protagonizada por Hasselhoff por tanto no requería de grandes filigranas efectistas. Pero claro, esto es una producción televisiva y tampoco hay muchos medios lo que deriva en una pobreza de escenarios y escenas de acción evidente.

Y es que, aunque Hasselhoff de el pego, es más malo que pegarle a un padre y su actuación y ganas de ser intenso dan más bien risilla. Encima la trama no es que dé mucho de si. Por no haber no hay ni un malo de enjundia y al final todo pasa factura. Destacar que el guión es obra de un jovencito David S. Goyer, habitual del mundo del cómic y posterior guionista de unas peliculillas de Batman y otra de Superman. Ese mismo año Goyer también escribiría otra película basada en un personaje de Marvel y, esta sí, era buena.

Como curiosidad mencionar que hace poco Hasselhoff criticó la elección de Samuel L. Jackson al interpretar el personaje de Furia en Los Vengadores y dijo que contasen con él para la segunda parte. Que espere sentado.