Tom Cruise se ha especializado en papeles de acción en donde el espionaje habla claro y alto y las investigaciones y conspiraciones lo acompañan allá donde vaya. En Jack Reacher: Nunca vuelvas atrás es un fuera de la ley sin equipo A que protege a los débiles y combate el delito, en este caso el contrabando ¡posiblemente de armas! Ya no está solo, a su lado dos féminas, una guapa militar y una adolescente de armas tomar, se unirán a su lucha ayudando en lo que pueden. El lobo solitario ya no puede dedicarse solo a guardar sus espaldas, ahora tiene que hacer de niñera de una hija secreta de la que antes nunca tuvo noticias.
Las frenéticas huidas, persecuciones al límite y peleas en lugares solitarios son una constante en este tipo de films que buscan entretener a un público mayoritariamente masculino y joven. Hemos perdido para la causa a los cachas y forzudos de los ochenta pero unos nuevos héroes con menos kilos han surgido reciclándose para que este género no desaparezca. Este año le toca a Jack Reacher y el año que viene será el turno de John Wick, herederos de otros valientes agentes secretos como el conocido Jason Bourne.
Lee Child, autor de las novelas de este personaje, ha dado vida a una saga que ya va por la segunda película y lo que le queda. El ex oficial militar va a usar en esta todas las armas de las que dispone para hacer que la justicia triunfe convirtiéndose en el adalid de las causas perdidas, nuevas misiones imposibles para su currículum.
En Jack Reacher: Nunca vuelvas atrás ya nos imaginamos lo que va a suceder. Malos con pésima puntería, asesinatos y muertes a mansalva y duelo final con el enemigo más peligroso y letal al que se ha enfrentado, en una azotea que nada tiene que ver con Blade Runner. Humanos como este Jack Reacher tienen los huesos de goma y las caídas no les afectan, encuentran a quien buscan a las primeras de cambio y no se complican la vida con amores de fin de semana o familiares. Son duros, fríos y calculadores, con una vida en la que el dolor no existe y la retirada no entra en sus planes. Un modelo de padre defectuoso que comienza ahora a coger gustillo a eso de cuidar a los hijos y que hace amigos allá por donde pasa. Las apariencias engañan y lo que antes era desconfianza se convierte en posible futura amistad y contacto importante para nuevas misiones.
El suspense combinado con el drama y la acción dan como resultado este cocktail de tiros, explosiones, proyecciones y cargas con más de una víctima como nos tiene acostumbrado últimamente el bueno de Edward Zwick. Ha dejado a un lado las katanas, los arpones y otras armas blancas y ha preferido para la ocasión las de fuego que sin duda son más efectivas y espectaculares.
Los blockbusters a veces se disfrazan de obra menor, como aquí y se gastan todo su presupuesto en estrellas como este incombustible Tom Cruise olvidándose de guiones más elaborados. En Jack Reacher: Nunca vuelvas atrás echamos de menos una solución menos rápida y evidente que haga que nos devanemos en mayor medida el coco. No solo nos gustan los puñetazos y patadas en peleas coreografiadas, a veces también nos gusta la intriga y aquí por desgracia brilla por su ausencia.
Muchas de las cosas buenas se han quedado olvidadas en la primera parte, confiemos en que vuelvan pronto y también Cobie Smulders que sigue con papeles de mujer sobradamente preparada para dar guantazos como ya vimos en Los Vengadores de la Marvel.
https://www.youtube.com/watch?v=FXyby8yh6qw