Tres películas tuvimos la oportunidad de ver en el día de ayer en el Festival de Cine Fantástico de Málaga. Tres filmes muy diferentes que dan buena muestra de lo ecléctico e interesante de la selección realizada.
Dentro del ciclo Superhéroes: Del Leotardo al Látex, se pudo ver la producción australiana Griff The Invisible que cuenta las peripecias del joven y cándido Griff que sueña con ser un superhéroe. Aun tocando temas similares a las recientes Kick-ass o Super, Griff The Invisible hace más hincapié en la psicología de los personajes y destaca por su su tierna historia de amor. La invisibilidad y la máscara ante la sociedad como metáforas de nuestro días, espejos de la vida que nos gustaría tener y de las locuras que somos capaces de hacer por mantener una alegre mentira, ¿o es una triste realidad? Griff The Invisible no deja de ser una película humilde con sus carencias y virtudes pero bien merece un visionado.
Brad Anderson siempre será recordado como el director ese que hizo a Christian Bale desfallecer en El Maquinista. Ahora regresa con Vanisihg on 7th Street, una película que bien podría haber ideado M. Night Shyamalan. De repente, una extraña oscuridad se apodera de Chicago. Unas extrañas sombras comienzan a devorar a todos los habitantes de la ciudad y seguiremos a cuatro personajes que se han librado de tan misteriosa plaga. Anderson tiene maña para la ambientación pero le falta el talento del hindú. Así todo queda en un interesante punto de partida que se va desinflando por la falta de ideas.
Por último, Rammbock, la película de zombies que nunca puede faltar. Una horda de muertos vivientes ataca un patio de vecinos berlinés y éstos tendrán que apañárselas para sobrevivir. Tan efectiva como poco original, su escasa duración, apenas 60 minutos, impide que te aburras demasiado y te pegues un par de sustos si te dejas.