Con la cantidad de información que nos aborda estos días quizás muchos ya habéis olvidado esa escena de Baahubali 2 en la que unos soldados se catapultaban a sí mismos para asaltar las murallas de una ciudad. A Bollywood no le interesa ser realista, es un cine que procura ofrecer al espectador una fantástica mentira con la cual pueda evadirse de sus miserias. Grave atentado contra la realidad, pero efectiva distracción. La razón por la que, inconsciente de mí, acepté ver El misterio del dragón es la misma por la que, meses después de que se hiciese viral, aún me fascina esta escena. El choque cultural llega a ser tan vasto que es casi imposible asimilar que una película en la que Jackie Chan y Arnold Schwarzenegger comparten pantalla pueda ser tomada en serio por cualquier espectador.
Las producciones chinas (que no de Hong Kong) tienen un encanto especial que trasciende su calidad. Quizás sea el folklore, quizás su ingenuidad, pero siempre se encuentra una razón por la que alguien tan especial como yo es capaz de obviar lo que en Occidente se consideraría cutre. El misterio del dragón deja ver sus costuras continuamente de alguna u otra forma y por ello es difícil aguantar su visionado, pero detrás de aquellos detalles que dejan entrever la falta de un abultado presupuesto reside una entrañable fe en lo que se hace. O no. A estas alturas no sabría ver en esta obra pereza ante el encargo o un cariño sumo por el cine; lo que sí es visible es la hermandad que une a rusos y chinos, unidos contra la tirana burguesía. El pueblo, unido bajo el amor del dragón, comparte con los rusos un cometido que trasciende fronteras con facilidad. La propaganda velada permea sin ser vista en el espectador en su vertiente más esencial, aquella que promete amor y riquezas compartidas, algo que a quien venga convencido no le importará, pero a quien observe desde fuera le puede causar rechazo.
Resulta paradójico que una película de corte socialista se valga del capitalismo para convencer a Schwarzenegger y demás. Paradójico, no raro – eso daría a entender que sería poco común -. El misterio del dragón, más allá de la peculiaridad del dúo que sin protagonismo en absoluto insufla el carisma que le falta a esta película, poco tiene más que aportar en nuestras vidas. Conocer la existencia de esta rareza, como con Baahubali 2, ya sería suficiente para disfrutar de la misma; verla por completo sólo alimentaría nuestro placer culpable, nuestra masoquista expectación.
5 comments
Curioso que ni se haya usted molestado en comentar que esta película es una secuela de «Trasilvania, el imperio perdido». Ni lo sabía, ¿verdad? 🙂
Primera noticia de que esto era secuela de lo que comenta Mapache. El caso es que ni la distribuidora se ha preocupado en poner en contexto nada de esto, recordando que el protagonista es el mismo y solo ha incidido en que salen Jackie y Arnold xd . Y ahora que recuerdo muy recomendable la primera versión de «El Viyi» https://www.filmin.es/pelicula/el-viyi
Teniendo en cuenta cómo fue la primera, hasta cierto punto es normal que tiren de Chan y Chuche para ver si rascan algo en taquilla, aunque salgan tres minutos en pantalla. De hecho, quizá hasta ni son los mismos distribuidores. Tiro de memoria, pero creo que aquella fue directa al mercado doméstico. La pusieron tan a parir que, cuando la vi, no me pareció tan jodidamente mala. ?
Alguién me puede decir si hay relación entre esta película y Viy ?
https://www.youtube.com/watch?v=CPcPtizGymc
Sí, es la secuela.