En más de una ocasión le exprese al CEO de esta web uno de mis mas inconfesables deseos, que no es ni más ni menos que asistir a según qué reuniones de producción, sobre todo por ver qué es capaz de explicar determinado individuo para convencer de que su idea será un absoluto éxito, y que eso no tiene discusión, ya incluya dragones rosas en un drama clásico, o metralletas en manos de un centurión romano, él vende su idea, y alguien que se cree listo se la compra. ¿Admitid que a vosotros también os gustaría? Algunas producciones son merecedoras de una mas concisa indagación sobre sus orígenes, tiene más interés que el resultado final.
Este año 2012 hemos tenido delante de nuestras narices uno de esos fenómenos que podríamos denominar Por casualidades de la vida todos tenemos la misma idea al mismo tiempo y que como somos una panda de mal pensados, supondremos que algo raro habrá, ya que suponer que las mentes brillantes piensan de igual modo.
Tengo contabilizadas cinco, si, cinco películas con fecha del año 2012 que tratan la temática del archiconocido cuento infantil, que a su vez fue el primer largometraje de animación de la Disney, y que llegó a ganar un Oscar. Pues por si no fuera suficiente, y en una era de diversidad de formatos audiovisuales, las mentes brillantes deciden volver a contarnos esa historia, alterándola, edulcorándola, retorciéndola y, porque no decirlo, ridiculizando el recuerdo o la imagen que transmite un clásico más que consolidado.
Mirror Mirror, una de las dos producciones que cuentan con mayor difusión y presupuesto de las cuatro mencionadas, cuenta a priori con todo lo que necesita una gran producción, una gran actriz premiada por la academia para un papel que le supone un cambio en su carrera, la hija de un famoso como protagonista, pese a carecer de cualquier talento, natural o adquirido, para ejercer la profesión de actriz, un director con un tremendo gusto estético como es Tarsem Singh, e incluso la presencia de Sean Bean para poder sacrificarlo llegado el momento y acrecentar la leyenda. Parece ser que se tenía todo lo necesario para hacer una película medianamente decente, nadie pediría una obra maestra, aunque mimbres se tenían. Pues no, y podría repetir cien veces ese no, con diferentes razones y gestos, no, no, y no, y es difícil escoger un punto para analizar, ya que desde la carencia de talento absoluto de la protagonista, a la que acompaña con la carencia de belleza, sobre todo si interpreta a la chica que encarna la belleza mas sublime, pasando por los enanos ninjas con zancos, que no son mineros, los diseños de vestuario, literalmente copiados de la versión animada, aunque alguno los llamara inspiración, o la sobreactuación de Julia Roberts, totalmente descolocada en un papel donde se vuelve mas histriónica de lo que suele ser habitual, y con un final de la historia que no puede emocionarnos, bajo ninguna circunstancia, porque cualquier niño o niña lo conoce antes de tener la edad legal para ir a la sala a ver la película. El término mediocre le viene grande a esta producción, y no se podría añadir mucho más. Pese a sentir admiración por el trabajo de Tarsem Singh, alguien que demostró tanta personalidad en trabajos anteriores, y como es llevado a estos extremos, no deja de sorprenderme.
Blancanieves y la Leyenda del Cazador la mas tardía en llegar a las sales de cine, y que contaba con todos los factores para atacar el éxito en el mercado adolescente, una protagonista ya consolidada en ese sector, el partener con carrera cinematográfica en ciernes y con un matrimonio de portada de revista, además de ser uno de Los Vengadores, el papel de la madrastra interpretado por Charlize Theron que además anda enfrascada en otra gran producción para el mismo año, y así dará aun mas que hablar, grandes efectos especiales y gracias a la genialidad de la informática en el cine, grandes actores interpretando a los enanitos del bosque, que en esta ocasión si son mineros, o al menos eso parece, porque no lo dejan del todo claro. Y para ello eligen a un director sin relevancia ninguna, depositando en sus manos semejante presupuesto, seguramente por falta del mismo para pagar uno bueno, ¿y que conseguimos? Una película que no transmite, un Cazador que tiene los mismos gestos que Thor, pero teñido de oscuro, y que interpreta un personaje pendenciero, que a la postre se redimirá, que ya se escribió en Willow con Mac Mardigan, una protagonista que no parece estar en la película en la que la estas viendo, y que usa el mismo gesto sexi, o mejor dicho, de cara de asco que cuando mira a su vampiro enamorado, en esta ocasión para casi decirle a un Troll del bosque aquello de ‘Eres hermoso’ lo cual acabara transformándose en su sello personal, como el ‘Volveré’ de Arnold. La historia es inconexa, disparatada para mal, con giros a lo sobrenatural y lo místico, que más que parecer Blanca nieves parece un episodio de El Capitán Planeta que culmina con la transformación de una Juana de Arco de cuento de hadas, pero que en realidad no tiene importancia, porque yo me pase media película pensando en porque Kristen Stewart lleva pantalones y botas altas debajo de un vestido de doncella, yo es que debo estar muy mal, porque a mi ese detalle no se me escapaba. Esta producción, por si no fuera suficiente, cuenta con el rumor de una segunda parte, donde la madrastra debe resucitar de entre los muertos y volver como zombi.
Grimm’s Snow White ha sido lanzada directamente al mercado de video de alquiler, pese a ser, a priori una historia mas interesante que las dos anteriores, y digo a priori, porque vista la película, no cuenta nada de lo que el narrador describe al principio, aunque aquí tenemos enanos, elfos arqueros, misticismo por un tubo, dragones que se comen gente con efectos mas propios de peliculas de los 70, y un final que es como los anteriores, madrastra que muere y niña que llega a reinar, pero con un montón de cosas que pasan por en medio y que no se sabe muy bien porque.
Snow White: A Deadly Summer podría haber sido una idea original, y por desgracia no lo es, es algo que esta mas cerca de las producciones para televisión que emite la tercera cadena Española los sábados y domingos por la tarde que de algo que pueda llamarse cine, y que difumina lo que pudo ser una idea brillante en algo que no merecería ser mencionado si no fuese por el titulo.
También hay una película española, de esas que mandamos a los Oscars para que digan que los españoles que hacen cine son muy intelectuales, que además de ser muda y en blanco y negro, cuenta la historia de Blanca Nieves relacionada con la tauromaquia, más que nada para que se note bien las raíces de la producción de la película, ya que todos sabemos que a los que son cultos de verdad no les pueden gustar los toros ni su estética asociada. También parece ser que para 2014 hay rumores de al menos dos nuevas películas sobre esta misma historia, no sea que nos quedara algún cabo suelto de tan complicado argumento.
No es que este en contra de contar de nuevo historias ya contadas en el cine, aunque no es que sea algo que me fascine, y en mi opinión, rara vez se está a la altura del original, pero esto no es una crítica contra el remake, o contra que un director quiera hacer su versión. Esto es un señalar con el dedo la falta de ideas, la carencia de creatividad de supuestos artistas que viven de su supuesto talento, un remarcar que no necesito que me cuenten diez veces la misma historia, y que si querría que se hiciera una de las cientos de historias de los hermanos Grimm que no se llevaron al cine, y se arriesgara, pero esa es solo mi utopía como espectador, yo no soy un erudito, yo solo puedo opinar y decir si una película me gusta o no me gusta, y alguien que sabe que el remake era una practica necesaria cuando se dio el paso del cine mudo al sonoro, e incluso cuando no existían los medios de reproducción domésticos, pero ahora, para hacer semejantes atrocidades ¿Es realmente necesario?
Dejare el asunto hasta que se estrene Blanca Nieves y la leyenda del Cazador 2
5 comments
Una vez vista la película española, que no había visto cuando escribí la entrada, diré que tiene el mismo sentido que The artist, era una sucesión de escenas YA HECHAS en otras películas, demasiado homenaje, pues a esta le pasa igual, DEMASIADO, esta CALCA los planos de el cine costumbrista, tanto de la república como de Postguerra, DEMASIADO homenajea el estilo de entonces, por lo que la cosa del elemento innovador se me desploma. asociar enanos con el mundo de la tauromaquia tampoco es una genialidad, por lo que considero que esta película es un miramiento de ombligo intentando molar mas que nadie, al mas puro estilo de la serie de televisión Once upon a Time, y tratando de meter en un mismo saco todo concepto tachado de original del ultimo año y del pasado, haciendo muy a la española, y vendiéndolo como el paradigma de lo cultural, lo cual de entrada ya genera rechazo, llamando a esto cosas como ‘cine de verdad’ y obra maestra, cuando en realidad no aporta nada que no se hiciera, de manera magistral en otros tiempos, con menores medios, y esgrimiendo mas ingenio, … lo de ahora, sinceramente, no tiene ningún merito.