Salam cruza la frontera entre Cisjordania y Jerusalén todos los días para ir a su trabajo, como ayudante de los diálogos hebreos en una serie palestina de mucho éxito llamada Todo pasa en Tel Aviv (Tel Aviv on Fire), y es por ello que conoce a Assi, un soldado israelí que trabaja en el control de fronteras. Ambos entablan una relación simbiótica al enterarse Assi de que Salam trabaja en la serie favorita de su mujer. Su trato: humus a cambio de ayuda para escribir las escenas del personaje judío de la serie.
La trama se guía mediante el avance de la serie y como, capítulo a capítulo, Salam va encontrando su lugar como guionista, y el principal conflicto de Algo Pasa en Tel Aviv nace del debate sobre cómo el final de la serie. Assi quiere que la espía protagonista se case con el general judío. El principal guionista prefiere que acabe con una explosión. Salam prefiere no tender hacia un extremo u otro, escribir un final un poco más complejo. Esta representación a pequeña escala de los conflictos ideológicos de la zona es probablemente lo más valioso que aporta la cinta. El planteamiento es original pero, por desgracia, después de que arranque, empieza a hacerse repetitiva y el ritmo decae.
Incluso si conseguimos mantener el interés, hay puntos de la trama que quedan sin resolver y caen el olvido. En esta comedia de enredos hay más enredos que comedia, y tampoco es muy reseñable por elementos ajenos al guion como la fotografía o las interpretaciones, pero merece la pena para satisfacer nuestra curiosidad occidental sobre la realidad del día a día en el contexto del conflicto palestino-israelí. Pero, notablemente, no pone como villanos a ninguno de los personajes y, por tanto, a ninguno de los bandos.
Y es que aunque estemos ante una comedia, esta película está claramente muy políticamente cargada. Imagino que es algo inevitable para una historia ambientada en el contexto palestino-israelí, pero sin embargo, en todo momento se plantea como algo cotidiano y sin mucha esperanza de cambio. Su punto de vista es que la situación es algo establecido, lo normal. Como dice Talla, la actriz francesa que protagoniza la serie, “¿Sabes lo bueno de París? Que no está ocupada”.